Doctrina, Principios y Aplicaciones

“Si la verdadera doctrina se entiende, ello cambia la actitud y el comportamiento. El estudio de la doctrina del Evangelio mejorará el comportamiento de las personas más fácilmente que el estudio sobre el comportamiento humano”


He considerado iniciar este primer post, compartiendo un artículo que considero realmente importante, del Elder David A Bednar, sobre las doctrinas, los principios y las aplicaciones, del cual enseño a los misioneros en el CCM, y que forma parte del  capítulo 4, de su libro "Increase in Learning", que habla del "Entorno para un aprendizaje del Evangelio", sin más preámbulo comencemos:

¿Qué es una Doctrina?

Elder Bednar lo explica así: “Una doctrina del evangelio de Jesucristo, es una verdad revelada por el Padre Celestial a sus hijos aquí sobre la tierra, y esa verdad revelada pertenece a nuestro progreso eterno”. A veces pensamos que la doctrina son misterios como donde queda Kolob y cuánto tiempo toma llegar allí. La doctrina es simple, la doctrina es fundamental. Por ejemplo, la naturaleza de la trinidad es una doctrina….La doctrina del plan de felicidad, ¿por qué estoy aquí? ¿De dónde venimos? Y ¿hacia dónde vamos? El plan del Padre Celestial, eso es una doctrina. La Expiación de Jesucristo, esa es una doctrina”.

De esto aprendemos que una doctrina es una verdad revelada por Dios para nuestro progreso eterno y siempre responde la pregunta de ¿POR QUÉ? Las pregunta del alma primordialmente son preguntas de ¿por qué? ¿Por qué estoy aquí en la tierra? Cuál es la respuesta: El plan de felicidad. ¿Por qué fue necesario que el Cristo haga el sacrificio expiatorio? La respuesta: la doctrina de la expiación. No en todos los casos pero la mayoría de las veces, doctrinas simples y fundamentales del evangelio restaurado de Jesucristo van a contestar las preguntas de ¿Por qué?”

Entonces cuando alguien tiene una pregunta de por qué, la respuesta será una doctrina del evangelio. La doctrina del Evangelio es verdadera; son eternas, inmutables y se relacionan con el progreso eterno y la exaltación de los hijos e hijas de nuestro Padre Celestial... Las doctrinas centrales del Evangelio de Jesucristo son relativamente pocos en número.

Las doctrinas del Evangelio contestan a las preguntas del "¿Por qué?" Por ejemplo, la doctrina del plan de felicidad responde a las preguntas del ¿Por qué estamos aquí en la tierra?, ¿Por qué el matrimonio entre un hombre y una mujer es ordenado por Dios? y ¿Por qué la familia es fundamental en el plan del Creador para el destino eterno de sus hijos? La doctrina de la Trinidad nos ayuda a comprender el por qué podemos llegar a ser perfectos como nuestro Padre y su Hijo Jesucristo son perfectos 1. La doctrina de la expiación explica por qué Jesucristo es nuestro mediador y abogado ante el Padre 2.

Las doctrinas del Evangelio restaurado se encuentran en los libros canónicos de la Iglesia de Jesucristo de los Santos de los Últimos Días, las enseñanzas de los profetas y apóstoles vivientes y las declaraciones autorizadas y proclamaciones de la Primera Presidencia y el Quórum de los Doce Apóstoles. En última instancia, sin embargo, sólo el Presidente de la Iglesia y el Quórum de la Primera Presidencia tienen la autoridad para establecer las doctrinas de la Iglesia.

Cada uno de los tres primeros artículos de la fe, hacen hincapié en una doctrina fundamental del Evangelio restaurado de Jesucristo. Tanto el contenido como la secuencia de las doctrinas que se presentan en los artículos son instructivas. Por ejemplo, el primer artículo de fe se centra en la Deidad. "Nosotros creemos en Dios el Eterno Padre, y en su Hijo Jesucristo, y en el Espíritu Santo."3

El segundo artículo de fe destaca el Plan de Salvación y el papel de la Expiación en la superación de las consecuencias de la caída de Adán. "Creemos que los hombres serán castigados por sus propios pecados, y no por la transgresión de Adán."4

El tercer artículo de fe destaca el Plan de Salvación y el papel de la Expiación del Salvador para superar nuestros pecados individuales y las debilidades mortales. "Creemos que por la expiación de Cristo, todo el género humano puede salvarse, mediante la obediencia a las leyes y ordenanzas del Evangelio."5

Las doctrinas del Evangelio son una fuente divina de poder e influencia para el bien. El presidente Boyd K. Paker explicó: "Si la verdadera doctrina se entiende, ello cambia la actitud y el comportamiento. El estudio de la doctrina del Evangelio mejorará el comportamiento de las personas más fácilmente que el estudio sobre el comportamiento humano... Por eso hacemos tanto hincapié en el estudio de la doctrina del Evangelio"6.

En la declaración del presidente Packer, dos palabras son importantes y deben hacerse hincapié. La primera: la verdadera doctrina cambia la actitud y el comportamiento. La verdadera doctrina indica que proviene de Dios y es correcta y precisa. Las fuentes de estas enseñanzas son las enseñanzas de los siervos ungidos del Señor y las Escrituras. Las falsas doctrinas, opiniones personales, especulaciones y puntos doctrinales no causan y no pueden producir el mismo efecto justo en nuestra perspectiva y comportamiento.

Segundo: La verdadera doctrina, cuando se entiende, cambia la actitud y comportamientos. Es interesante observar que el presidente Packer enseñó que no sólo conocer la verdadera doctrina nos cambie. En lugar de ello, la enseñanza debe ser entendida. Como ya comentamos en el capítulo 2 [del libro], la palabra entendimiento a menudo está vinculada y /o asociada en las escrituras con el corazón y se refiere a un resultado o a una conclusión revelada. Por lo tanto, la verdadera doctrina cuando se confirma en el corazón como verdadera por el testimonio del Espíritu Santo cambia la actitud y el comportamiento. El conocimiento de la verdadera doctrina es necesaria pero no suficiente. Entender la verdadera doctrina, tanto en nuestra mente como en nuestro corazón es esencial para las actitudes y acciones rectas.

Las doctrinas básicas del Evangelio son el fundamento espiritual para todo lo que aprendemos, enseñamos y hacemos; y una fuente vital de poder y fortaleza a medida que nos esforzamos por llegar a ser lo que el Señor espera que seamos. Por ejemplo, la importancia eterna de las relaciones sexuales y el matrimonio eterno sólo puede entenderse adecuadamente en el contexto del Plan de Felicidad de nuestro Padre Celestial. El énfasis de la institución del matrimonio, sin vincularlo adecuadamente a la doctrina sencilla y fundamental del Plan no puede proporcionar la suficiente orientación, protección y esperanza en un mundo confuso en estos temas vitales. Un conocimiento y testimonio del Plan de Salvación lleva a los hombres y a las mujeres a tener esperanza y a prepararse para casarse en la casa del Señor, mediante el fortalecimiento de los compromisos de honrar el convenio sempiterno del matrimonio y superar el miedo e incertidumbre que hace que algunos eviten o posterguen el matrimonio. Como hemos aprendido de las enseñanzas de Alma, Dios dio a los hijos de los hombres mandamientos "después" de haberles revelado el plan de redención 7.

En los tiempos actuales y venideros, sólo el Evangelio restaurado de Jesucristo tiene las respuestas a los importantes y eternos porqués del alma... la respuesta a los porqués más fundamentales es fácil de encontrarlas en la doctrina de Cristo.

¿Qué es un Principio?

Elder Bednar explica que es un principio de la siguiente manera: “Un principio es una guía que viene de una doctrina. Bajo el marco principal del evangelio de Jesucristo los principios se encuentran en las doctrinas sencillas. Consideren los primeros tres artículos de fe: ¿Cuál es el enfoque del primer Artículo de fe? La doctrina de la trinidad y la naturaleza de la trinidad. ¿Cuál es el enfoque del segundo Artículo fe? El plan, la expiación y la caída de Adán. ¿Cuál es el enfoque del tercer Artículo de fe? El plan, la expiación y “mi” caída individual. ¿Y el cuarto Artículo de fe? Los principios y ordenanzas por cuales la expiación de Cristo y el Plan de felicidad llegan a funcionar en mi vida. Hay una secuencia muy específica de doctrina y principios en los trece Artículos de Fe”.

Un principio es una guía basado en la doctrina para el ejercicio justo del albedrio. Entonces un principio es una “guía” o una ayuda para saber “qué” hacer”. Elder Bednar sigue: Si la expiación responde la pregunta de “¿Por qué?” ¿Qué tenemos que hacer? Tenemos que “arrepentirnos” de nuestros pecados y tener fe en Cristo. Los principios responden la pregunta de  ¿Qué?

Un principio del Evangelio es una guía basada en una doctrina dirigido al adecuado ejercicio de albedrío moral. Los principios son subconjuntos o componentes de verdades más completas del Evangelio. Los Principios sirven de guía. Los principios correctos, además de que siempre están fundados y edificados en las doctrinas, no cambian y responden a las preguntas del "¿Qué?" Muchos principios pueden surgir y ser asociados con una doctrina sencilla.

Un principio no es un comportamiento o una acción específica. En vez de eso, los principios proporcionan pautas básicas de comportamiento y acción. Por ejemplo, el cuarto Artículo de Fe dice: "Creemos que los primeros principios y ordenanzas del Evangelio son: primero, Fe en el Señor Jesucristo; segundo, Arrepentimiento; tercero, Bautismo por inmersión para la remisión de los pecados; cuarto, Imposición de manos para comunicar el don del Espíritu Santo."8

Los tres primeros Artículos de Fe identifican las doctrinas fundamentales del Evangelio restaurado. El cuarto artículo de fe, sin embargo, relaciona los principios; indicando cómo cumplir con: la doctrina.

Los dos primeros principios que emanan de la doctrina de la Expiación son la fe en el Señor Jesucristo y el arrepentimiento. La Expiación explica el por qué, y los principios se centran en el qué. Por lo tanto, los principios de la fe en Jesucristo y el arrepentimiento nos dan las guías necesarias para que la Expiación puede llegar a ser efectiva en nuestras vidas.

Elder Dallin H. Oaks, ilustro la importancia de los principios en su instrucción a los poseedores del Sacerdocio Aarónico en una reunión del sacerdocio en una conferencia general de la Iglesia. Describió el principio de que no haya distracción y demostró que un poseedor del Sacerdocio Aarónico nunca debe querer hacer nada en apariencia o en comportamiento que pueda desviar a cualquier miembro de la Iglesia de su adoración o renovación de sus convenios. También hizo hincapié en los principios relacionado con el orden, la limpieza, la reverencia y la dignidad.

Curiosamente, el Elder Oaks no dio a los jóvenes una larga lista de cosas "para hacer" y "para no hacer". En su lugar, él explicó el principio, con la expectativa de que los jóvenes, sus padres y sus maestros utilicen sus propias capacidades, criterios e inspiración para seguir esa guía.

No voy a sugerir reglas detalladas, dado que las circunstancias en los diferentes barrios y ramas de nuestra Iglesia mundial son tan diferentes que una regla especifica que pueda requerirse en cierto lugar quizás sea inapropiada en otro. Más bien sugeriré un principio basado en las doctrinas. Si todos entienden este principio y actúan en armonía con él, existirá muy poca necesidad de reglas. Si se necesitaran reglas o consejos en casos individuales, los líderes locales pueden proporcionarlos, en armonía con las doctrinas y los principios correspondientes. 9

El profeta José Smith enfatizó el poder de los principios rectores cuando se le preguntó cómo él era capaz de guiar y gobernar a los Santos de los Últimos Días de manera eficiente. Él respondió: "Les enseño principios correctos y ellos se gobiernan a sí mismos" 10.

¿Qué son las Aplicaciones?

Elder Bednar explica las aplicaciones de la siguiente manera: “Un principio no es un comportamiento, un principio no es una acción. Un principio es una guía para el comportamiento y para la acción. Entonces nos comportamos y actuamos correctamente. Las aplicaciones es lo que hacemos. Poner en práctica responde la pregunta de ¿Cómo? Las doctrinas responden las preguntas de por qué, los principios responden las preguntas de qué y las aplicaciones las respuestas de cómo, este es el comportamiento, está es la acción”.

Las aplicaciones responden la pregunta de ¿Cómo?, es lo que “hacemos”, es la acción. Podeos usar como ejemplo la Doctrina de la Expiación, el principio del Arrepentimiento y la aplicación los pasos del arrepentimiento. (Reconocer, sentir pesar, confesar, restituir y no volver a hacerlo).

Sabemos que tenemos el principio de leer las escrituras, el cómo (la aplicación) puede ser leerlas de principio a fin, leerlas por tema, en la mañana o en la noche, todo eso es la aplicación.

Tenemos la doctrina de que la familia es ordenada por Dios, tenemos los principios que aparecen en la familia una proclamación para el mundo, la aplicación puede ser hacer la noche de hogar.

Pregunta: “Elder Bednar usted nos dio el ejemplo del plan, la obediencia y el diezmo, ¿Podría ser el diezmo un principio?” ¡Por supuesto! si el diezmo fuera un principio ¿A cuál doctrina se relaciona? Usted investigue y averigüe al estudiar sus escrituras. Escríbalo en un papel traten de ver cómo va, si el pagar el diezmo es un principio ¿Cuál es la aplicación? Pagar el primer domingo del mes. Entonces el principio es el diezmo, es la guía y diferentes pasos o aplicaciones. Ustedes encontraran este patrón de doctrina, principio y aplicación en todas las cosas que lee en Predicad mi evangelio. Tal vez no lo han visto pero ahora si lo verán. Vayan y busquen la relación entre doctrinas, principios y aplicaciones.

Tomen la doctrina de la Expiación, el principio del arrepentimiento y la aplicación los pasos del arrepentimiento. Cada uno de ustedes recuerda los pasos del arrepentimiento, reconocer el pecado, sentir pesar por el pecado, confesar, restituir el pecado y no volver a hacerlo. Esos son las aplicaciones de los pasos, es así como se lleva a cabo el arrepentimiento. ¿Pueden hacer todos los pasos y no arrepentirse? ¡Sí! Les voy a dar un ejemplo. Cuando era el Rector de BYU Idaho, se dé un estudiante que cometió una terrible transgresión sexual un viernes en la noche, fue al obispo el domingo y le dijo: “Obispo usted es el último paso en mi lista, he hecho todos los pasos, ahora confieso y me siento bien”. ¡Un terrible pecado sexual el viernes en la noche! Hizo todos los pasos y pensó que se iba a sentir bien el domingo en la mañana porque el obispo era el último de los pasos. Sabía todas las aplicaciones y los pasos pero no tenía ninguna clave, no entendía el principio del arrepentimiento y la doctrina de la Expiación. Arrepentirse significa “regresar”. Cuando pecamos nos alejamos de Cristo y cuando nos arrepentimos regresamos a Cristo, volvemos a Cristo otra vez a Él. Este joven había hecho todo el comportamiento pero nunca había incluido a Cristo, nunca había regresado a Cristo. Simplemente haciendo el comportamiento o dejando el comportamiento no es arrepentimiento hasta que uno regresa a Cristo.

Las aplicaciones son comportamientos reales, medidas activas, prácticas o procedimientos mediante los cuales los principios del Evangelio son exaltados en nuestras vidas. Mientras que las doctrinas y los principios no cambian en nada, la aplicación de por sí puede generar cambios de acuerdo a las necesidades y a las circunstancias. Las aplicaciones responder a preguntas del "¿Cómo?". Muchas aplicaciones pueden evolucionar y unirse en un solo principio. En la Figura 2, observe el gran número de comportamientos y acciones específicas que se han extendido del principio de la fe en Jesucristo.

 Según lo enseñado por el Elder Oaks, el principio de no distraer, por ejemplo, se puede aplicar de forma adecuada cuando los poseedores del Sacerdocio Aarónico evitan el extremismo en el vestir, en su corte de cabello, en su forma de hablar y de comportarse. Los tipos de posibles distracciones que deben evitarse obviamente puede variar en Alabama, para África, y para Argentina, aunque los principios son siempre los mismos, las aplicaciones pueden variar de acuerdo a las necesidades y las circunstancias.

Entonces tenemos que:

   Doctrinas  = ¿Por qué?

Principios  =   ¿Qué?

   Aplicaciones = ¿Cómo?

La gran pregunta

Luego de explicar la diferencia de estos tres elementos, Elder Bednar hace la siguiente pregunta: Ahora quiero que en su mente respondan está pregunta honestamente, no den la respuesta que piensan que suena bien o piensan que deberían dar. En su vida en la iglesia, en su propio estudio, en su manera de vivir el evangelio ¿Se han enfocado en principios, doctrinas o aplicaciones? Para los que son un poquito mayores y han servido en la iglesia, en presidencias de estaca, sociedad de socorro y como obispos ¿se han enfocado en doctrina, principios o aplicaciones? Hay varios canosos con pelo blanco aquí y dicen: “no voy a decir nada pero es aplicación”. De alguna manera nos acercamos a las aplicaciones como una manera de arreglar las cosas, hacer mi vida mejor y ayudar en la iglesia a que funcione como tiene que funcionar.

Luego para responder la pregunta Elder Bednar explica el siguiente ejemplo: Esto es una ilustración boba pero verdadera. ¿Qué hacemos para mejorar la orientación familiar? Buscamos cosas como esto: “Hágales a sus maestros orientadores un pastel y es un pastel fresco el primer día del mes, pero si llegan al 25 ya es un pastel viejo. Entonces es un incentivo para que vengan al primer día del mes”. ¡Qué idea inspiradora! Tenemos un pastel para que la gente venga a hacer la orientación familiar.

Si quieren tener un cien por ciento de orientación familiar busquen al más malo, a la persona más mala, la más enojona y que él los asuste a todos a que tienen que hacer su orientación familiar para el 15 del mes y si no lo hacen para el 15 lo vengo a buscar. Bueno me voy a hacer mi orientación familiar. ¿Los números suben? ¡NO! Creemos que todo está muy bien, pero no sucede así porque cuando este hermano se va o se muere se cae la orientación familiar. Entonces ¿ha habido un mejoramiento real? No.

Pregunta: si invito a todos los hombres de este cuarto que anoten en una tarjetita y escriban la doctrina de la razón por la que hacemos la orientación familiar ¿Podrían hacerlo?: “Bueno tenemos que ir una vez al mes” ¡No! Esa es la aplicación. “Tengo que reportar al presidente del Quórum de elderes”. ¡No! Eso es una aplicación. ¿Cuál es la razón doctrinal de por qué hacemos la orientación familiar? Saben qué, no muchos hombres pueden dar una doctrina basada en las escrituras y eso es por qué la orientación familiar no funciona. Hacemos la orientación familiar cuidar, ayudar y fortalecer a los miembros. Viene de las escrituras, no le voy a decir de donde ustedes encuentren donde. Esa es la razón, es para fortalecer y cuidar, los hombres que no hacen la orientación familiar no son perezosos sino que simplemente no han aprendido la doctrina. No es que nadie les ha dicho sino que no la han aprendido. No ha penetrado.

Nos enfocamos en las aplicaciones porque pensamos que estamos en control. “Voy a administrar esto, voy a hacer que esto suceda, esta es la iglesia del Señor y el la hace a su manera. Me gusta confiar en brazo de carne”. Pensamos que es más rápido y más fácil, pero no es así. No hay ningún impacto espiritual que perdure que simplemente manipular las aplicaciones. Si sirvió como presidencia del Quorum de Elderes ¿qué hicieron para mejorar la orientación familiar? “la reorganizamos”, ¿qué hacen al reorganizarla? ¡Es una aplicación!

Si un hombre entiende la doctrina y el principio asociado con la práctica y la aplicación de la orientación familiar él nunca faltará. La doctrina siempre es la respuesta, no en las aplicaciones falsas, sino en la doctrina pura y los principios del evangelio de Jesucristo.

La doctrina cambia el comportamiento

Elder Bednar explica que la respuesta siempre es la doctrina, o el POR QUE. Ahora vamos a ver como la doctrina cambia el comportamiento, elder Bednar ahora pasa a analizar esta cita del Presdiente Boyd K. Packer:

“Si la verdadera doctrina se entiende, ello cambia la actitud y el comportamiento. El estudio de la doctrina del Evangelio mejorará el comportamiento de las personas más fácilmente que el estudio sobre el comportamiento humano”11. “La doctrina verdadera, entendida, cambia actitudes y comportamiento” déjenme que lo repita otra vez: “la doctrina verdadera, no mis opiniones personales, no mis pasatiempos, no lo que a mí me interesa, sino las doctrinas fundamentales. Las doctrinas verdaderas entendidas cambian actitudes y comportamiento. Interesante la palabra “entendida” en las escrituras no habla en algo mental o una compresión mental. Si les importa que sus investigadores entiendan lo que diga, pero eso nunca será suficiente. El entender en las escrituras está en el corazón.

Ustedes conocerán a personas con toda clase de comportamientos, desafíos y aun con adicciones ¿qué van a hacer para ayudar a alguien así? Alguien que esté adicto a la pornografía, al tabaco, al alcohol o a las drogas ¿Qué van a hacer para ayudarles? la respuesta está en la doctrina. Su amor no los cambiará aunque ayudará. Es la doctrina y el testimonio que viene por el poder del Espíritu Santo. Es por eso que ustedes tienen que saber las doctrinas fundamentales y sencillas para que ellos puedan así encontrar la respuesta, al usted estudiar como individuo y estudiar en compañerismo.

Si es verdad que la doctrina verdadera, entendida, cambia actitudes y comportamiento, y si ustedes están trabajando con alguien que tiene problemas con la pornografía. ¿Qué doctrina y que principio, si entendido, cambiaria esa actitud y ese comportamiento? Eso les sugiero a ustedes que es la pregunta con la que deben comenzar. En vez de pensar: “¡así es como lo vamos a arreglar!” Es tan característico para los misioneros en su ánimo y amor por el investigador que tiene problemas de fumar y vienen todos los días a la casa a orar con este investigador para que pueda hacerlo todo el día y no fumar, pero eso nunca funcionara solo, porque ustedes no siempre estarán ahí.

Otro ejemplo, sus investigadores le preguntaran millones de aplicaciones y preguntas. ¿Saben lo que hacen los misioneros? Le dan otra aplicación o una guía, responden preguntas de aplicaciones con un principio. Alguien les preguntará: “los mormones y la poligamia”. Tantos misioneros empiezan a defender las prácticas de la poligamia y dicen: “bueno hubo un pequeño número de porcentaje que practicaron la poligamia”. Hablan de esas cosas que son buenas pero no hacen nada de bien. “creemos en todo lo que Dios ha revelado, todo lo que actualmente revela, y creemos que aun revelará grandes e importantes asuntos pertenecientes al reino de Dios12. La poligamia fue introducida por una revelación dada al profeta José Smith y la poligamia fue descontinuada por medio de la revelación a un profeta. El tema no es la poligamia, el tema es la revelación y si Dios habla hoy como está escrito en el Antiguo y Nuevo Testamento.

Estaba con una persona en el Caribe. Estábamos teniendo una sesión de preguntas y respuestas en una capacitación de líderes. Un hermano que se acababa de bautizar hace unas pocas semanas se paró y me pregunto: “Elder Bendar ¿quiero saber si puedo comer cerdo?”. La iglesia de que venía tenía una dieta muy estricta y restricciones muy rígidas donde no podía comer cerdo. Entonces le dije: “le recomiendo que lea la sección 89”. Sabiendo que era converso le explique lo que era Doctrina y Convenios y le dije que si leía la sección 89 tendría su respuesta. Él se paró y me volvió a decir: “Elder Bednar quiero saber si puedo comer cerdo”. Le dije: “Déjeme sugerirle que lea sección 89”.

Hicimos lo mismo cuatro veces y se empezó a molestar, me dijo: “Su respuesta no me satisface”. ¿Hubiese sido muy fácil para mí darle la respuesta? ¡Sí! ¡Coma cerdo si quiere! Pero no le hubiese hecho nada de bien a él. De manera muy cortés le dije: “Me ha preguntado esto como ocho veces y me va a seguir preguntando y yo le voy a seguir dando la misma respuesta, entonces digamos que es un empate, usted lea sección 89 y encontrará su respuesta”. Se fue muy molesto. Al otro día vino a la siguiente reunión y llamo a un hermano y le dijo: “Dígale a Elder Bednar que encontré mi respuesta”.

No hubiese sido tan importante y tan bueno si solo le hubiese dado la respuesta. Lo que quería hacer era guiarle para aprender por sí mismo y que el obtuviera su propia respuesta. Guiarlo a los principios correctos y la doctrina. Seguro que tendrán que responder preguntas para ayudar, pero no tienen que hacer de una manera que la persona no sea dependiente de ustedes. Llévenlo al Salvador, a su verdad y las guías, las doctrinas y los principios, para que ellos puedan ser independientemente espirituales.

Si ustedes ponen estos elementos básicos: Doctrina, principio y aplicación. Si ustedes piensan en sus investigadores ¿Qué doctrina entendida ayudaría con este desafío que estamos teniendo? Cuando sean padres en vez de decirle a sus hijos lo que deben y no deben hacer (aunque es necesario), y no funciona, consideren esta pregunta para usted y su cónyuge: ¿Qué doctrina si entendida ayudaría a nuestros hijos a ser castos en un mundo cuando nadie es casto? ¿Qué doctrina si la entendieran es su corazón les protegería de los dardos del adversario? Y en vez de asumir y decir: “Bien les tenemos que decir esas doctrinas”, hagan la segunda pregunta: “¿Cómo podemos ayudarles a ellos a aprender esa doctrina?”. No solo decirle, sino como la pueden aprender. ¿Qué doctrina si entendida cambiaría la actitud y el comportamiento? Y como podemos entonces nosotros a ayudarles a entender esas doctrinas. Si ustedes ponen en práctica eso en su propia vida al estudiar, estarán en condiciones de ayudar a quienes aman como investigadores. La respuesta siempre está en la doctrina.

Uso del Contexto

El contexto formado por las doctrinas, los principios y las aplicaciones es una herramienta multipropósito que puede ser utilizado para mejorar nuestro aprendizaje del Evangelio y también puede ser de gran valor, cuando oramos aplicamos el principio de la oración y la norma de pedir, buscar y llamar.

Por favor, no miren y usen este contexto como un conjunto rígido de las definiciones o como una fórmula que permita obtener las respuestas "correctas" sobre qué aplicaciones y principios están asociados con una doctrina específica del Evangelio. De hecho, algunos lectores quizás esperen un apéndice al final de este libro en el que se muestra una categorización rígida y exhaustiva de las doctrinas, principios y aplicaciones. Pero no existe una lista definitiva para identificar y clasificar adecuadamente todos los principios y doctrinas del Evangelio. Y sinceramente tal lista tendría poco valor. Por otra parte, el propósito de esto es hacer explorar, experimentar y ejercer la fe en el Señor a medida que uno mismo aprende "la doctrina del reino"13 y llega a "conocer los verdaderos puntos de la doctrina del Salvador "14 al hacer preguntas y buscar respuestas... Algunos temas del Evangelio, aparentemente se pueden categorizar apropiadamente tanto como principios y la doctrina. Por ejemplo, La obediencia ¿Es un principio o doctrina? Estudiar las Escrituras ¿Es un principio o una aplicación? Estos son el tipo de preguntas que la estructura del Evangelio pretende ayudar a identificar y explorar.

Conclusión

Hace un par de meses asistí a la semana de la educación en BYU Idaho, entonces fui a la clase de un profesor de BYU y el repasó este mismo discurso con nosotros. Analizamos que muchas veces en la iglesia, nos enfocamos demasiado en las aplicaciones y no en las doctrinas. Por ejemplo, el menciono que a veces enseñamos como doctrina las aplicaciones que consideramos verdaderas acerca de cómo leer las escrituras, cómo guardar la palabra de sabiduría, o que hacer o no en el día de reposo, sin embargo la conclusión fue que eso es personal. Solo debemos enseñar la doctrina verdadera y los principios correctos, y dejar que los demás busquen la manera de aplicarlos en sus vidas y se gobiernen a ellos mismos. Cada uno encontrará una aplicación diferente de acuerdo con circunstancias en que se encuentre.

Es mi invitación que cada vez que tengamos una duda sobre algo que tenemos que hacer en la iglesia y no nos guste, o si hay cosas que sabemos que tenemos que hacer pero nos cuestan, que recordemos el ¿por qué?, que recordemos la doctrina.

EXTRAS:
Doctrinas básicas del evangelio:
    La Trinidad
    El Plan de Salvación
    La expiación de Jesucristo
    Dispensación, apostasía, y restauración
    Los profetas y la revelación
    El sacerdocio y las llaves del sacerdocio
    Las ordenanzas y los convenios
    El matrimonio y la familia
    Los mandamientos



 Notas
1.  Timoteo 2: 5; Doctrina y Convenios 45: 3
2. Mateo 5:48; Nefi 12:48
3.  Los Artículos de Fe 1:1
4.  Los Artículos de Fe 1:2
5.  Los Artículos de Fe 1:3
6.  “Little Children,” 17
7.   Alma 12:32
8.   Los Artículos de Fe 1:4
9.   El Sacerdocio Aarónico Y La Santa Cena - Liahona Nov. 1998
10. Citado por John Taylor, Millennial Star, 15 Noviembre de 1851, 339
11. Liahona, enero de 1987, pág. 17
12. Artículo de fe nº 9
13. D. y C. 88:77
14. 3 Nefi 21: 6
15. www.lds.org